Que mala suerte! Cuando comenzaba a disfrutar del viaje y me adaptaba a vivir con otras 40 personas, me tuve que volver!
Lo que más valoré del viaje fue compartir con pibes de mi edad un par de dias. Recién ahí pude darme cuenta que los patrones culturales de Israel no se parecen ni un poco a los mios. Más allá de la parte religiosa, me sorprendió la construcción de la identidad de cada uno de los israelies. Según ellos mismos no hay un "israeli promedio" y a pesar de eso todos se identifican con lo mismo: el territorio...algo que para mi es casi insignificante.
Esta identificación con el territorio es tan fuerte que chicos que viven en ese lugar desde hace 10 años (o aún menos) hablan de su paso x el ejercito con un orgullo y un sentimiento de pertenencia que me resulta extraño. De todas las expresiones de nacionalismo extremo que vi durante mi corta estadía, la historia de Yael fue la que más me impactó. Quizás me sorprendió que una chica argentina, que vive en Israel desde los 12 años, cuente con una mezcla de miedo y orgullo lo que vive todos los días mientras cumple el servicio militar obligatorio. Ella que entiende (y hasta supongo que comparte) la visión de mi generación sobre el ejercito y todo aquel uniformado, solo aplica estos preconceptos a los milicos argentinos. Y me queda la duda de saber si yo también podría hacer eso (sé que necesitaria mucho tiempo, xq en 12 dias me fue imposible).
Todos mis nuevos amigos israelies (todos soldados como marca la ley) tienen un amigo muerto en un enfrentamiento. Muchos de ellos hasta fueron al frente de batalla y vieron morir en sus brazos a algun amigo. Será que pasar por esa experiencia traumatica explica en parte el nacionalismo? No estoy segura, pero para un Estado que busca crear una identidad que supere a la identidad religiosa, el paso x el ejercito es lo que logra fusionar a todos esos distintos modelos de israelies, y permite así que ese mix de personas tan distintas que conviven en un territorio tan pequeño y conflictivo se transforme en algo más o menos parecido a una Nación.
Lo que más valoré del viaje fue compartir con pibes de mi edad un par de dias. Recién ahí pude darme cuenta que los patrones culturales de Israel no se parecen ni un poco a los mios. Más allá de la parte religiosa, me sorprendió la construcción de la identidad de cada uno de los israelies. Según ellos mismos no hay un "israeli promedio" y a pesar de eso todos se identifican con lo mismo: el territorio...algo que para mi es casi insignificante.
Esta identificación con el territorio es tan fuerte que chicos que viven en ese lugar desde hace 10 años (o aún menos) hablan de su paso x el ejercito con un orgullo y un sentimiento de pertenencia que me resulta extraño. De todas las expresiones de nacionalismo extremo que vi durante mi corta estadía, la historia de Yael fue la que más me impactó. Quizás me sorprendió que una chica argentina, que vive en Israel desde los 12 años, cuente con una mezcla de miedo y orgullo lo que vive todos los días mientras cumple el servicio militar obligatorio. Ella que entiende (y hasta supongo que comparte) la visión de mi generación sobre el ejercito y todo aquel uniformado, solo aplica estos preconceptos a los milicos argentinos. Y me queda la duda de saber si yo también podría hacer eso (sé que necesitaria mucho tiempo, xq en 12 dias me fue imposible).
Todos mis nuevos amigos israelies (todos soldados como marca la ley) tienen un amigo muerto en un enfrentamiento. Muchos de ellos hasta fueron al frente de batalla y vieron morir en sus brazos a algun amigo. Será que pasar por esa experiencia traumatica explica en parte el nacionalismo? No estoy segura, pero para un Estado que busca crear una identidad que supere a la identidad religiosa, el paso x el ejercito es lo que logra fusionar a todos esos distintos modelos de israelies, y permite así que ese mix de personas tan distintas que conviven en un territorio tan pequeño y conflictivo se transforme en algo más o menos parecido a una Nación.
1 comentario:
es un poco terrible, no?
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